NAVASANA: MI POSTURA FAVORITA

No hay una sola clase en la que no hagamos navasana. Nava significa nave, barca o bote, de ahí su nombre al asemejar su forma.

¿Por qué es mi postura favorita?

Porque es una postura retadora donde tienes que activar todo tu cuerpo para mantenerte en equilibrio, además de trabajar la fuerza. Pero lo mejor de todo es que es una postura fácil, todo el mundo la puede hacer y hay muchas variaciones que puedes ir probando.

Cómo hacer en la postura:

Primero siéntate en el suelo con las piernas juntas y eleva los pies.

Opción 1: manos atrás en el suelo, rodillas flexionadas.

Opción 2: manos a las piernas.

Opción 3: extiende brazos.

Opción 4: extiende piernas

Opción 5: si quieres y puedes… ¡¡SONRÍE!!

En cualquiera de las opciones mantén siempre la espalda recta, hombros atrás proyectando el corazón, una pierna presiona a la otra activando todo tu cuerpo, desde la punta de los pies hasta la punta de las manos. Mirada a los dedos de los pies, pies en punta. Relaja los músculos de tu cara.

Cómo controlar la respiración:

“La respiración en esta postura se mantiene constante, sin retenerla para que el efecto se produzca sobre los órganos abdominales y no solo sobre los músculos del vientre. Al principio, la espalda podría estar demasiado débil para soportar el esfuerzo de esta postura. Tan pronto aparece la fuerza nos podremos mantener en ella. Esta postura proporciona vida y vigor a la espalda y mejora nuestra agilidad”. Luz Sobre el Yoga, de B.K.S. Iyengar.

Este libro es una guía que te vendrá muy bien tanto si estás empezando como si ya tienes experiencia, ya que incluye fotografías y descripciones detalladas de más de 200 posturas que puedes realizar en cualquier lado.